lunes, 12 de octubre de 2015

¿Tenemos un feminismo de élite?

¿Qué opináis? ¿Estáis de acuerdo con este estudio?

Aunque haya habido grandes avances, la prometida igualdad entre hombres y mujeres sigue siendo una quimera en la mayor parte de las profesiones. En las sociedades occidentales la mujer ha conseguido equipararse al hombre en términos legales y culturales, pero aún sigue habiendo enormes diferencias el ámbito laboral y económico.

En los últimos cincuenta años, el feminismo ha presionado mucho para que hombres y mujeres tengan las mismas oportunidades y las mismas retribuciones en su puesto de trabajo. Gracias a esta presión, la brecha entre hombres y mujeres ha disminuido, pero sólo para algunas privilegiadas. Según un estudio que acaba de presentar el Instituto para la Investigación de Políticas Públicas de Reino Unido (IPPR), un think tank británico de tendencia progresista, la igualdad está avanzando sólo entre los profesionales de mayor nivel, pero no entre los trabajadores de menor cualificación.
Según pone de manifiesto el estudio británico, las diferencias entre mujeres de distinta cualificación laboral son significativamente mayores que las que existen entre hombres. Las mujeres con un título universitario que nacieron en 1958 ganan casi tres veces más (198%) que las mujeres con un trabajo no universitario de ese mismo año. La diferencia salarial entre los hombres del mismo año, y misma cualificación profesional, es de menos de la mitad: un 45%.

Feminismo de élite

Para Dalia Ben-Galim, directora asociada del instituto que ha elaborado el estudio, podemos sacar una conclusión clara de estos datos: “El feminismo se ha centrado en las mujeres de alta cualificación, y ha dejado de lado al resto de mujeres”.En su opinión, los avances de las mujeres de la cúspide han ocultado la desigualdad presente en los estratos inferiores.
Durante un tiempo, explica Ben-Galim en la presentación del estudio, las políticas de igualdad se han preocupado sólo por romper el “techo de cristal”, la limitación invisible de las carreras profesionales de las mujeres, y sus esfuerzos han ido encaminados a promover la presencia de éstas en los consejos directivos de las grandes empresas. Mientras, el feminismo ha fracasado a la hora de promover la conciliación familiar y la igualdad de oportunidades.
Para Ben-Galim el enfoque de las políticas de igualdad no podía estar más equivocado: “El género sigue teniendo un fuerte impacto sobre las perspectivas salariales de las mujeres, pero la clase social, la educación y el entorno profesional tienen más peso a la hora de marcar su evolución profesional”.
La maternidad: el factor clave
El estudio británico revela que la maternidad sigue siendo el factor más importante para determinar la evolución profesional de las mujeres. Los datos no dejan lugar a dudas: las mujeres que tienen hijos antes tienen una carrera laboral menos exitosa. Entre los hombres ocurre todo lo contrario, los padres de familia ganan más que sus compañeros sin hijos.  
El IPPR ha pedido a las autoridades británicas que promuevan medidas para que los permisos de paternidad sean más progresivos, las guarderías sean más baratas y accesibles y se ofrezcan mejores trabajos a tiempo-parcial.

Fuente: El confidencial

El rincón de la mujer emprendedora


No hay comentarios:

Publicar un comentario